En esta casa de Sydney, sus dueños reflejan su pasión por el arte. Los tonos de sus cuadros rojos, rosas y verdes se mezclan con muebles rusticos neutros, piezas de diseño y la naturaleza que se deja entrever por las ventanas dando como resultado un espacio elegantemente decorado. La cocina al estar abierta al salón y al office da una gran sensación de amplitud permitiendo compartir con los pequeños y mayores cada momento. Los tres hijos de sus propietarios tiene también una zona de juego donde pintan y cuelgan sus obras en la pared compartiendo esta pasión con sus padres.
 Cocina y comedor abierto al salón. Cocina diseñada en un frente con encimera de acero como los electrodomésticos. 
 Mesa de madera con sillas Tolix en rojo y tronas Stokke del mismo color. Cuadros de artistas Australianos 
 
Salón comunicado con el comedor y cocina. Sofá en tonos neutros con mesa auxiliar de madera en verde y butaca de bambu con cojines estampados.
 
 
Zona de juego de los niños a continuación de la cocina donde pintan y cuelgan sus mejores obras.  Fuente: Sydney Home